Elías Ricardo Figueroa
Uno de los extranjeros más influyentes en la historia de Club Atlético Peñarol. El chileno nacido el 25 de octubre de 1946, debutó en su país a los 18 años en el conjunto Unión la Calera. En dicho cuadro jugó una sola temporada antes de pasar a Santiago Wanderers, donde también estuvo solo un año.
En el año 1967, posterior a una buena Copa del Mundo y la Copa América de ese mismo año disputada en Uruguay, el zaguero de tan solo 20 años llamó la atención de varios equipos del continente pero finalmente fue fichado en Peñarol (que en ese momento era el vigente Campeón de América) donde permaneció hasta 1971.
Durante su estadía en el Decano, logró el bicampeonato del torneo uruguayo en 1967 y 1968 y la Supercopa de Campeones Intercontinentales de 1969, derrotando en una recordada final al histórico Santos, encabezado por su figura Pelé. En dicho partido Elías Figueroa fue el mejor jugador del encuentro gracias a su talento y liderazgo habitual.
Reconocido por su ya mencionado liderazgo, tenía como principal característica un talento poco común para su posición, llamado el defensor de guante blanco en su país. Don Elías integró en todos los años el equipo ideal del Campeonato Uruguayo e incluso en tres ocasiones fue elegido como mejor jugador del mismo.
Posterior a su pasaje por Peñarol, el zaguero continúo su carrera en el futbol brasileño. Jugando para el Internacional de Porto Alegre donde se convirtió en ídolo de la institución luego de haber ganado seis Campeonatos Gauchos y dos Serie A. En dicho país se lo galardonó a fines del Siglo pasado, como el mejor extranjero que disputó el Campeonato Brasilero.
Después de cuatro años en el Internacional, volvió al futbol de su país. En este caso al Palestino, donde permaneció tres años y ganó tanto la Copa de Chile, como el Torneo de Primera División. Previo a su retiro jugó un año en el Fort Lauderdale Strikers de Estados Unidos, para luego sí culminar su carrera en Colo Colo en 1982.
Según testimonios del mismo jugador, el pasaje por el futbol uruguayo le sirvió de tal manera que lo terminó de consolidar como un gran futbolista. Cuando fue consultado en qué piensa cuando le hablan de Peñarol afirmo lo siguiente:
“El mundo. Yo recorrí el mundo con Peñarol, pues antes se hacían muchas giras. Yo me hice jugador en Montevideo, que fue mi Universidad de fútbol. Ya había jugado un Sudamericano y un Mundial con Chile, pero yo era un jugador muy nuevito. Me faltaba la personalidad que adquirí en Uruguay. Me faltaba la mentalidad ganadora: ese Peñarol era dueño de casa en cualquier parte del mundo. El Tito, Forlán, Matosas, Pedro Rocha -extraordinario-, Joya, Spencer, Abadie, Silva ‘El Pescador’, Caetano, Mazurca ‘El Chiquito’… Jugando en ese equipo, aprendí que no existe la visita. ¿Cuidarnos por qué no estamos jugando en casa? ¡No, por favor, nunca! Ese cuadro era ganador. Yo no sé si el éxito tan grande que tuve después en Brasil hubiese sido tal sino pasaba por Uruguay”
Con el conjunto carbonero, también consiguió el Torneo de Honor en 1967, el Torneo Cuadrangular en 1968 y la Copa Montevideo en 1971. Terminó su pasaje por Peñarol con 241 partidos jugados, en los que convirtió 6 goles.
A fines del Siglo XX se lo reconoció como mejor jugador chileno del Siglo, y mejor defensor Sudamericano del Siglo, por la reconocida IFFHS (Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol).
Dentro de otros reconocimientos personales que hablan de la talla de jugador que vistió la casaca aurinegra, fue distinguido por la FIFA como ‘El mejor jugador del mundo en 1975 y 1976’, siendo elogiado hasta por el gran Franz Beckenbauer que en un entrevista en ese momento afirmó: “Yo soy el Figueroa de Europa”.
Link de la entrevista citada: https://www.federicoguiglia.com/todo-sobre-elias-ricardo-figueroa-uno-de-los-veinte-mejores-jugadores-del-mundo-entrevista/
Agustín Oronoz – UdelaR