Oscar Ferro, entrenador de arqueros de Peñarol, habló desde Colombia con Wilson Méndez a pocas horas del partido decisivo ante Deportivo Cali. El arquero, quien supo integrar el plantel campeón de América en 1987, recordó su visita al Pascual Guerrero, aquel heroico plantel y obviamente se refirió al partido de esta noche.

Plantel: “Es un equipo que tiene hambre de ganar. Lo está mostrando. Mejor que no nos vean como favoritos. Ahí es cuando sorprendemos. Tenemos un plantel muy completo en todos los sectores. Tenemos esa gente grande que también teníamos en el 87, que quieren a los más jóvenes. Peñarol es un plantel muy duro para cualquiera. Somos difíciles para cualquier equipo de América y del mundo. Creo que hay jugadores con la suficiente clase y experiencia para afrontar este tipo de partidos”.

Esta noche: “Yo tengo una confianza bárbara. Cuando Peñarol sale y juega siempre tengo fe”.

Pascual Guerrero: “El estadio cambió muchísimo, está modernizado, actualizado. Queda el recuerdo del 87. Fue una etapa magnifica para mí y para todos los compañeros que vivimos eso, a Peñarol campeón de la Libertadores”.

El equipo del 87: “Teníamos un plantel con un promedio de 22, 23 años. Los más grandes eran Eduardo Pereyra y el “loco” Obdulio Trasante, pero ahí está la base de todo. De los más jóvenes, el más grande era el Chueco (Perdomo). Muchos formados en Peñarol desde chiquitos y con un líder como Eduardo que fue el que nos marcó y encaminó. Más allá de lo que atajó en esa Libertadores, creo que se ganó porque lo teníamos dentro del plantel. Un grupo extraordinario excelentemente conducido por el Maestro (Tabárez) y el Profe Herrera».

Picardías: “Cuando llegamos al vestuario lo “inundaron” de humo, prendieron los extractores y de repente no nos veíamos a un metro de distancia. Tuvimos que salir y vestirnos en otro lado. No se podría respirar. Por eso la Libertadores es linda. Antes tenía esas trampitas que te hacían por fuera. Un torneo espectacular, divino”.

Arqueros suplentes: “Dentro de la juventud que tienen, tienen experiencia. Leandro Gelpi ha estado en una selección olímpica, Washington Aguerre ha estado en una Sub 20, Gastón Guruceaga está haciendo proceso de selección. La tienen clara, saben cuál es su objetivo y norte. Por eso todos los días se rompen el alma para cumplir ese objetivo que tienen en la cabeza. Lo bueno es la disposición de trabajo. Lo dijo un arquero en el curso de instructor de goleros en España: “El puesto de arquero es 10% inspiración y 90% sudor. La tiene clara””.