En otra noche de básquetbol, Peñarol se impuso a Urupan en cifras de 76 a 74 y sigue como único puntero e invicto del DTA. Luego de un partido que estuvo controlado y se llegó a sacar una ventaja de 13 puntos, la visita tuvo una gran remontada en el último cuarto y se puso a 3 puntos. En el minuto final y en el momento más caliente del partido apareció «Pepusa», el capitán sacó la carpeta y mantuvo la diferencia en el marcador para conseguir una victoria clave.

El quinteto inicial en el Palacio fue el de siempre, con Diego Álvarez en la base, el escolta fue Damián Blazina, alero Juan Wenzel y los internos fueron Alejandro Pérez y Brian Craig.

El primer período fue de lo más parejo de la noche, los dos equipos no estaban tan finos pero encontraban situaciones en ataque y llegaban a anotar. Lo mejor del local estuvo corriendo la cancha, se aprovechaban las pérdidas de la visita y se corría la cancha principalmente con Wenzel y Pérez que eran las principales fuente de gol. Sin embargo al equipo le costaba el juego 5 vs 5 y había dificultades para encontrar gol en la pintura y también en el perímetro. Urupan terminó mejor los últimos minutos por eso se quedó con el cuarto 22 a 20.

En el segundo el carbonero se impuso más en el juego y dominó el trámite del mismo. La zona 2/3 le daba mucho resultado ya que no le convertían en la pintura y la visita se quedaba sin gol. En ataque llegaron dos triples de Álvarez y uno de Blazina. Se comenzaba a generar juego en la pintura y se lucieron Pérez, Craig y nuevamente un gran ingreso de Guerra para aportar gol bajo las tablas. Peñarol dominaba el encuentro y por eso ganaba. Urupan por momentos generaba buen juego pero era muy irregular. Se fueron al descanso largo ganando Peñarol por 43-34.

Tercer cuarto y el equipo continuaba sólido. Había buena rotación de balón en ofensiva y se lograban situaciones claras. Otra vez muy buenos ingresos de Erroizarena y Rivas, generando juego y movilidad en el ataque, además ambos entraron con la muñeca caliente y aportaron un triple cada uno. Otro de buenos minutos fue Asaravicius dominando los rebotes ofensivos y defensivos, incluso anotando también desde la zona pintada. Fue el mejor cuarto de Peñarol, el equipo estaba bien y el marcador lo reflejaba. Se llegó a sacar la máxima de 13 puntos y siempre se mantuvo una renta de entre 8 y 12 puntos. El final del tercero fue con victoria 61 a 49.

Cuarto final y parecía que todo terminaba con comodidad, se seguía desplegando buen juego y había gol. A pesar de todo el equipo fue perdiendo intensidad en defensa y los de Pando se vinieron con todo. Primero con una presión en toda la cancha, tratando de apurar la salida de Peñarol. En ataque tuvo a la figura de De Gouveia que rompía con facilidad la defensa aurinegra y asistía constantemente a sus compañeros, fue clave desde la generación de juego. Della Mea y Colman se hicieron pesados en la pintura y Urupan en un abrir y cerrar de ojos se puso a 3 puntos. Nuevamente Castrillón armó la zona 2/3 para defender las últimas posesiones. Segundos finales y todo estaba abierto en el marcador, pero apareció la figura de Alejandro Pérez. «El pibe de 40» volvió a ser determinante en la zona pintada para aportar un doble clave para sacar distancia y comenzar a cerrar definitivamente el partido.

Otro gran triunfo ante un rival directo y de mucho peso que nunca dio el partido por perdido y supo poner a Peñarol de local contra las cuerdas. Cuatro partidos y cuatro ganados, dos de ellos rivales directos, el arranque perfecto en el regreso al deporte. El goleador fue Alejandro Pérez que terminó con 20 puntos y 6 rebotes, lo siguió Diego Álvarez con 16 unidades y se destacó también Imanol Asaravicius con 10 puntos y 9 rebotes.